El otoño, la proximidad del invierno, ¡El frío!, es lo que tienen ,nos paralizan de alguna manera a los seres vivos.
Muchos árboles pierden sus hojas y se quedan desnudos.
¿Tienen frío los árboles? Noooo _ contestan nuestros niñ@s _ ¡Tienen que abrigarse, igual que nosotros.!
Marisol ha contado este bonito cuento al grupo de los pequeños y al de los mayores.
¡De acá para allá! ¡De allá para acá!
A todos les ha gustado mucho. Lo ha contado de manera muy gráfica y participativa
. Nuestros niños y niñas han interactuado: _sopla el viento _cae la lluvia _ sale el sol…. Sobre todo, han disfrutado colocándole hojas de muchos colores.





¡Qué bonito está! Y, lo más importante: » El árbol ya no tiene frío. Entre ellos y ellas, le han hecho un vestido.»